Pau Gasol ha anotado ya 10.000 puntos en la NBA. Aún recuerdo su primera canasta. Un mate finalizando de trailer un contraataque ante los Pistons. Tengo la imagen en la memoria junto a muchas otras de aquella primera temporada en Memphis. La seguí con un interés desconocido, porque era una novedad y mi horario laboral me permitía seguir los partidos por Internet y a veces por televisión en directo. Fue inolvidable.
Desde entonces acostumbré a mirar de vez en cuando sus estadísticas. Para eso la web de la NBA es incomparable. Y hace ya tiempo que me llama la atención su regularidad. Me explico. Si miramos la evolución de sus puntos, vemos que –salvo dos años por encima de los 20 de media- nunca sube de 19 y nunca baja de 17,6.
Con los rebotes, pasa algo similar. Su penúltima campaña en Memphis –la mejor en todos los sentidos- se fue hasta los 9.8. El resto, ha estado entre los 7,3 de mínima y los 9 de su media temporada pasada en Los Ángeles. Así, no extraña que este año sus medias (17,6 y 9) sean prácticamente idénticas a las del global de su carrera en EEUU (18,8 y 8,6)
Ha sido capaz de irse a máximas de 44 puntos o 18 rebotes. Supongo que algún día se habrá quedado sin anotar (eso no lo recuerdo) o sin coger algún rebote. Pero, no sé cómo lo hace, después de 533 partidos en la NBA, siempre acaba cuadrando las cifras. 3.718 canastas de 2 puntos, 18 triples y 2.547 tiros libres repartidos de forma casi matemática. No deja de impresionarme.
Desde entonces acostumbré a mirar de vez en cuando sus estadísticas. Para eso la web de la NBA es incomparable. Y hace ya tiempo que me llama la atención su regularidad. Me explico. Si miramos la evolución de sus puntos, vemos que –salvo dos años por encima de los 20 de media- nunca sube de 19 y nunca baja de 17,6.
Con los rebotes, pasa algo similar. Su penúltima campaña en Memphis –la mejor en todos los sentidos- se fue hasta los 9.8. El resto, ha estado entre los 7,3 de mínima y los 9 de su media temporada pasada en Los Ángeles. Así, no extraña que este año sus medias (17,6 y 9) sean prácticamente idénticas a las del global de su carrera en EEUU (18,8 y 8,6)
Ha sido capaz de irse a máximas de 44 puntos o 18 rebotes. Supongo que algún día se habrá quedado sin anotar (eso no lo recuerdo) o sin coger algún rebote. Pero, no sé cómo lo hace, después de 533 partidos en la NBA, siempre acaba cuadrando las cifras. 3.718 canastas de 2 puntos, 18 triples y 2.547 tiros libres repartidos de forma casi matemática. No deja de impresionarme.
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