Florentino y su repentino interés por la canasta

Dice Scariolo estos días que Messina ha ganado ahora una batalla que él perdió cuando estaba en el Real Madrid. No le falta razón. Ahora se adivina más interés en la sección pobre del club. ¿Qué ha cambiado en estos años? El presidente es el mismo y junto a él sigue Jorge Valdano. Dudo de que alguno de los dos haya descubierto una repentina e irresistible atracción por el baloncesto. Supongo que aún se extrañarán de no ver porterías en Vistalegre. Habrá que buscar por tanto otras explicaciones.


Yo sólo encuentro una clave y no es deportiva. Ha pasado otro lustro sin ver al equipo en la élite europea, es decir, en la F4 de la Euroliga. Situación aún más grave si tenemos en cuenta que durante esos años, Barcelona, Vitoria e incluso Málaga han sido invitados más o menos asiduos a esa cita. Y ése es el único escaparate que puede llamar la atención a Florentino desde su perspectiva empresarial.

El todopoderoso presidente ha visto una oportunidad de negocio en el baloncesto. Se ha dado cuenta del efecto arrastre de una selección campeona de Europa y del mundo y subcampeona olímpica. Ha visto cómo la Federación tiene cola de empresas dispuestas a invertir dinero en el baloncesto. Y quiere aprovechar la ola. Un Real Madrid en la próxima F4 –no digamos ya campeón de la Euroliga- supondría un gran negocio para él.

En resumen, el interés no es deportivo. Es empresarial. Si se consigue el objetivo, doblará la apuesta. Si no se consigue, se olvidará de nuevo del baloncesto y quizá dentro de unos años leamos a Messina decir que él también perdió esa batalla.